Tras la derrota del Bayern en Rostov, que jugó 2 horas antes por las bajas temperaturas en Rusia, tocaba al menos empatar para quedar primeros del grupo. Pero el equipo no fue conformista ni especuló con el resultado ante un flojo PSV Eindhoven, al que se venció por 2-0, con goles de Gameiro y Griezmann, que no recordó para nada al de la temporada pasada que lo tuvimos que eliminar en la tanda de penaltis. Así pues, el que parecía que iba a ser un partido por la lucha del primer puesto en Munich, ha quedado en jugar por el premio del dinero que da la UEFA por ganar ese partido. Por una vez vamos tranquilos.
Ahora toca centrarse en la liga, y conseguir la plaza para jugar champions la temporada que viene, y la Copa del Rey contra el Guijuelo.
Aúpa Atleti.
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